miércoles, 29 de enero de 2014

EL IMPERIO CONTRA PACO

CANTABRIA 2014: la batalla final.

Sin preámbulo: la organización ha diseñado un recorrido para el espectáculo ... y para arrebatarle la corona a Paco, que ganó el año pasado a base de tretas (Pajareeees, sácame una foto; Sofíaaaaaaa) y de gastarse la pasta en contratar a jamelgos (¿cuánto cobró Barrilete por tirar a por Javu en La cruz de Usaño? ¿Cuánto pagó por la mercadería de la farmacia? ¿Alguien se traga que un viejales como él arrasara a base de agua yodada?). En Cantabria 14' se desenmascarará sin piedad a los farfollas impostores. El Imperio contra Paco.

Fecha: por amplia mayoría la cita tendrá lugar el fin de semana del 15 de junio. Si las previsiones son de lluvia para ese fin de semana, habrá que decidir entre aplazarlo para el 29 de junio, o viajar hacia otro lugar el 15. Todo se hablará en un futuro birrin.

Ida y vuelta: el año pasado nos arrancamos hacia las cuatro y nos plantamos en Santoña para la cerveza a la hora del conde drácula. En la medida de lo posible estaría bien repetir. Si hay que salir más tarde, tomaremos las cervezas en la furgo (siempre que Pajares no manosee las neveras). Habrá que discutir la vuelta; pero si hace bueno es una lástima largarse el domingo tan pronto, sin tiempo a jugársela al Pelucas. Yo propongo playa para el domingo, tapeo en Santoña, y arrancar el campamento en cuanto hayamos despachado el chorizo, las rabas y los jibiones, decidiendo una hora tope de salida para estar en el tajo el lunes. Siendo tantos para conducir, podemos descansar durante el viaje. Habrá que hablarlo en un segundo birrin.

Furgonetas: jordi Bonjorn ha estado mirando la posibilidad de contratar furgón para abaratar costes y para que el viaje resulte más ameno. Tercer birrin y que nos lo explique.

SÁBADO: etapa dantesca: 165 kms, 4000 m de desnivel.


Para la salida del sábado tenemos que desplazarnos en coche unos 35 minutos, hasta un kilómetro pasado el pueblo de Linto (donde Pajares perdió la cabeza de carrera por tirar la foto. Miraos el reportaje de Cantabria 2013 y veréis una foto de Paco riendo como un perro veterano y a su izquierda el cartel de Linto). De allí arranca en el km. 0 el ascenso al alto del Caracol por Merilla. Reíros del nombre, pero el puerto es durillo y el paisaje de cagarse.




Tras rápido descenso llegamos a Selaya, hacendosa población de gente humilde de vida sencilla. Sin siquiera un kilómetro llano iniciamos el ascenso al llevadero puerto de la Braguía (que a alguno podrá recordarle a la costera población de Blanes, adonde durante el invierno el Karpas ha peregrinado muchos domingos en busca de braguías). La Braguía es un puerto de 8 kms llevaderos y de alegre paisaje salpicado de pastizales y sebes.

Nuevo rápido descenso hasta Vega de Pas, sencilla población, solariega donde las haya, capital de los valles pasiegos. Convendrá disfrutar del refrigerio y llenar cantimploras en el luciente diamante acristalado de alguna olvidada fontana, o remojar las posaderas (a una hora en la que lorenzo ya picará de lo lindo) en los hontanares que fluyen al albur salpicados de simpáticas florecillas. Eso, o meterse entre pecho y espalda par de pintas y un buen sobao pasiego en la centenaria confitería Diamantina, de rancio abolengo e ilustre linaje, por cierto.

Desde Vega de Pas arranca Estacas de Trueba, el único puerto de Cantabria que iguala en belleza y espectacularidad al de la Lunada. La carretera serpenteará durante 14 kms entre circos y laderas de un verde intenso, entre pequeños acantilados y alguna cascada silente. Hay quien sostiene que este puerto es incluso más espectacular que La lunada. Yo, personalmente, nunca he sido capaz de decidirme. En cuanto a la dureza sí puede decirse que las Estacas es algo menos pindio o, si preferís, más llevadero.




Desde la cima nos dejaremos caer hasta las Machorras, lugar de funesto recuerdo, y seguiremos descendiendo hasta San Pedro de Romeral, donde probablemente tocará comer. O unos callos con tripipota en casa Ataúlfo Rimadas, o unos escabeches en donde Julito, que eso ya se discutirá en un enésimo birrin.

Desde San Pedro ascendemos el suave y solitario puerto de la Matalena, que nos devuelve a Vega de Pas por una carretera recientemente asfaltada.




De allí ascendemos por la vertiente sur nuevamente La Braguía y, nuevamente en Selaya, serpenteamos por carreterillas que ni el tato conoce hasta dar de bruces con los temibles últimos 4 kms de la Estranguada.





En este punto preparar la alpargata, apontocarse, apretar los puños y parriba. El premio en la cima consiste en saber que solo tocará dejarse caer hasta los coches y dirigir nuestros cuerpos maltrechos hacia Berria, donde el yodo y la espuma de las olas que se retraen en la calina gris contra el cielo harán el resto.




2º etapa: 120 de carreteras solitarias.

Para el domingo la organización ha preparado un día de homenaje y celebración para que el pelotón y el pueblo cántabro pueda acercarse a Pipo tras proclamarse este campeón absoluto en la épica jornada del sábado. Podréis acercaros a entrevistarme, a pedir autógrafos, a tiraros unas fotos posando junto a mí. Las fans se llevarán un beso del gran campeón y, en fin, mis rivales podrán chinchar y rabiar por haber sido aplastados por el Gran Pipo el Grande. Un paseo triunfal por carreterillas estrechas y bucólicas sin coche ni pintura siquiera. Ahía os van unas fotos.






 Uno podría pensar que quién tuviera esas carreteras por aquí. Pero no os engañéis; aquí tenemos lo principal: una compañía impagable.